Archivos Mensuales: diciembre 2011

Estufa de leña

Desde que me mudé a La Cueva las pasadas pascuas, siempre salen conversaciones como estas cuando descubren que tengo estufa de leña:

– Ostras, yo no he tenido una nunca pero me han dicho que es genial
– Mmm, mis abuelos la tuvieron siempre y no sé, me gustaba más el brasero.
– Que no, que no, que tu la enciendes y el frío desaparece en toda la casa.
– Mmm, mis abuelos siempre la tenían puestas y cuando íbamos fuera del comedor, a las dos habitaciones contiguas, nos referíamos a ir a la nevera y al congelador.
– Que no, que no, que eso porque no era de seguido, que si tu la pones todos los día, al final, se caldea.
– Mmm, es que yo me voy a Los Doblones por la mañana y llego o por la tarde o por la noche. No veo factible lo de enchufarla e irme a dormir.
– Que si, que si, que aunque la pongas poco, hace.
– Mmm, ya, pero es que no me veo yo haciendo fuego.
– Que eexagerada eres! Si es muy fácil, yo la encendí hace dos findes en la casa de mi hermano.

Y escucho a toda esa gente cada vez que empieza a babear hablándome de lo maravilloso y lo afortunada que soy teniendo una estufa de leña.
Pero no me convencen. Tan sólo me lo empecé a plantear hace unas semanas, cuando una amiga de mi madre me dijo, en tono muy serio:

“Si no enchufas esa estufa, se te va a caer la casa encima. Cada vez tendrás más humedad. Y si no puedes entre semana, pues enciéndela  los sábados y domingos.”

Y ahí me acojoné y por eso hoy, lo he intentado. He empezado a las dos de la tarde, y el primer intento ha sido un poco fallido. Y eso que seguía la secuencia correcta para eneceder fuegos:

  1. Papel
  2. Cartón
  3. Ramitas
  4. Tronquitos

Al segundo intento parecía que si, pero ha durado nada. Cuando me he dado cuenta ya  se había apagado.
Y sobre las 6 de la tarde, he hecho el último intento y he gastado todos los tronquitos que había cortados.
Por supuesto, no han durado mucho.

Lo que si me dura desde que he empezado es el escozor de ojos, el olor y el humo en toda la casa.

Por no decir, que estoy pardal y he empezado con lo de encender la estufa después de haber tendido en la terraza dos coladas, donde está la chimenea de la estufa.

Como mola tener una estufa de leña, yeahhhh. (modo irónico on).

Yo me sigo quedando con la versión apagada: hace bonito y puedo poner mi planta gigante encima.

Cómo acabar el año. Y cómo empezar el otro.

La nochevieja es algo que siempre me ha preocupado, como todo.

¿Dónde? ¿Vale en cualquier sitio o hay unos mínimos a cumplir? ¿Con quién? ¿Qué se hace? ¿Hay algún plan no escrito que todo el mundo sabe? ¿Dónde está el manual de instrucciones?

Y yo con mis pajas mentales desde que tengo uso de la Nochevieja (revisando los links, me he dado cuenta que ya hablé de la mitad de este post el año pasado, pero bueno el que no quiera, que no lea =P).

Mi background nocheviejero podríamos dividirlo en 3 etapas:

  • Etapa adolescente/juvenil: las amigas con las que iba les dio por ser muy glamurosas y hubo varios años en los que fueron de cotillón, de esos que vas después de las uvas, que te costaba como unas 10.000 de las antiguas pesetas (1) y al que tenía que ir con vestido de gala, otros 60 pavos más. En esa etapa, mi familia no es que fuera pobre pero yo ya era muy responsable y creía que era un malgaste innecesario de dinero. Por no decir que yo, vestida con un traje de fiesta sería similar a una mesa camilla, como dice mi madre. Pero es si, hubiera sido la silla camilla más elegante de todas.
  • Etapa veinteañera: no me acuerdo de todas y cada una de las nocheviejas. Sé que probé lo de salir, lo de hacer algo alternativo, lo que reunirnos en una casa. En la etapa más chunga, fue la de cenar con la familia y de ahí a mi cuarto a ver una peli  esos programas fantásticos en los que Chayanne era capaz de cantar en 3 programas a la vez en la misma noche =P
  • La última (la más reciente, me refiero) etapa, que comprende de la nochevieja del 2007 a la nochevieja del 2010.
    • La del 2007 y la 2008 fueron en las Irlandas. La primera la pasé más sola que la una porque todos los que conocía tenían planes donde no estaba invitada e incluso mi MPI se vistió de gala para irse a una cena/fiesta. La segunda, fue en casa de Jabuk, con más gente pero como siempre, acabé enfadada con él.
    • La del 2009 me costó una pasta gansa, como unos 400 euros y unas 10 horas de ida y otras tantas de vuelta. La razón: ir de Belgrado, donde estaba de becaria, a Praga es un infierno y un dineral. Me apunté a la Nochevieja europea de becarios informáticos. Estuvo genial, conocí gente muy maja y nos lo pasamos bien. La parte de la discoteca fue un rollo, pero es que he descubierto que no soy discoparty people.
    • Y la del 2010, ya la conté aquí. Con mi investigación y mis experiencias personales.

Esta nochevieja, he progresado, cero pajas mentales. Y esta vez es en serio, me lo autocreo. Bien por mi.

Este sábado, aún no sé lo que voy a hacer pero sé que:

  • NO voy a cenar en casa de mis padres
  • NO voy a salir de fiesta. A veces hago esfuerzos y salgo, pero en Nochevieja es un agobio, todo lleno de gente, taxis agotados, controles…Quita, quita.
  • NO me voy a serntir culpable por no seguir al rebaño.
  • NO me voy a sentir sol
  • NO voy a obligar a los gatos a comerse las uvas.

A veces, muchas, de hecho, relato mi plan de tranqui, ya sea día especial o finde normal y la gente se emociona y se apunta como si  fuera algo megatrendy: hoy no salimos, hoy nos vemos unas pelis con palomitas y nos hacemos un trivial. Y yo también me emociono hasta que pasadas unas horas, alguien dice: y si nos vamos a este pub, qu eme han dicho que hay un concierto? Entonces la gente le sigue la corriente y se acaba siempre de fiesta, con su alcohol y su respectiva resaca.

Me apetece no hacer mucho, algo tranquilo, si es acompañada, pues claro que mejor, pero si no, veo a la familia y a los amigos frecuentemente. Este año es un día más.

Y este finde, con final e inicio de año, me apetece volver a intentar hacer galletas. La primera vez salieron horrorosas, tan duras que se me quitaron las ganas, pero ya me han vuelto.

Ese es mi propósito: acabar y empezar el año haciendo coas que me apetezcan, dejándome llevar.

(1)    Para los que lean esto en el futuro, 10.000 pesetas son aproximadamente 60 euros que a su vez, son aproximadamente 586 chirivinchis (2).
(2)    Chirivinchi: moneda de cambio en el futuro.

To be or not to be, that is the question

Al igual que el Shakespeare, yo también tenía un dilema parecido. El mío, gatuno:

Esterilizar o no esterilizar
C

Al principio, todo el mundo me dijo que lo hiciera. Que así no sufrirían. No sé que es lo que les pasa a los gatos si no los capas, no sé que es lo que sufren.

Luego me convencieron con cosas como que no marcan y que las cacas huelen menos.

Pero también me dijeron que no serían tan activos y eso no me gustó. Reconozco que el Tigre me araña el armario de tela, pero en general, se portan superbién. Y me encanta cuando se pasan ratos y ratos jugando y correteando por la casa. Eso no me apetecía “quitárselo”.

Aún así, creí que era la mejor opción.

Hasta que llegaron Zzazzu y Yorch y me dijeron que no lo hiciera, que no todos los gatos marcan, y que saliendo a la calle como salen, que no lo hiciera.

Pero es que se me escapan porque me rompen la mosquitera una y otra vez y por el mismo agujero entra La Negrita, una gata callejera que fue bautizada por la vecinilla pesada de 8 años que aparece n mi ventana de vez en cuando.

Y claro, ya tengo pesadillas: La Negrita se refugia en mi “cobertizo” de la leña y pare gatos: TODOS BLANCOS. Claro, por narices son míos. Y no puedo tener una manada de gatos, me volvería loca, como mi prima, y no quiero.

Así que ya lo he decidido y de hecho, tengo cita con el veterinario el 11 de enero de 2012.

Y, como dirían las chicas del undostres:

2 gatitos machos, a 82 euros cada uno, hacen un total de… una disminución de la paga extra.

Aún estoy a tiempo de cancelar la cita, pero creo que es lo mejor. ¿No?

A remojo

Así es el Turbo después de una ducha por tener la inciativa de refregarse sobre una caca.

Tigre hizo lo mismo hace unos meses. Y me costó más lavarlo, se me escapó 2 veces de la ducha. Menos mal que mi baño es de un metro cuadrado. No tenía mucho escapatoria.

 

Pobre Turbo, llevamos meses comentando lo gordo que está, y con el pelo mojado, he descubierto que no es para tanto =S

Ay que guapo está mojadito !

Elegir el peor día para nacer

Estos son los días en los que debería estar prohibido nacer: 1 de enero, 6 de enero, 29 de febrero, 1 de noviembre, 28 de diciembre (o 1 de abril en la mayoría del resto de países), 24 y 25 de diciembre y, por supuesto, el 31 de diciembre.

Debería haber una regla a nivel nacional. Tu tienes un hijo, por ejemplo, el 29 de febrero y para evitar no joderle el cumpleaños “anual” o que la gente le haga todo tipo de bromas y cálculos sobre su edad y cosas por el estilo… el médico te tendría que decir: ¿Señora, que día ponemos en la ficha?. Y si, tú eliges. Y esta elección sería legal, por supuesto. De hecho, voy a comentársela a Rajoy, para que lo ponga como anexo a lo eliminar los puentes festivos.

Ya lo estoy visualizando, es 24 de diciembre y todo el mundo bromeándole a la futura mamá: “Ya estarás a puntito, eh?”, “Mira que si lo tienes hoy…”, etc, etc.

Y ahí está la mujer, hasta las narices de las bromas, de la barriga y de tener que controlarse con la comida. Y se dice a si misma: “Qué narices, es Nochebuena y esto no se me va a notar, total, ya estoy enorme”. Y disfruta comiendo los langostinos, la sepia, el cordero, la piña y el melocotón en almíbar en un plato con helado, y un polvorón detrás de otro.

Hasta que llega el momento en que empieza a sentirse mal y confundida: ¿Me he pasado comiendo o estoy de parto?

Y sí, está parto. Al pobre marido lo pilla desprevenido, de risas con sus cuñados. Su reacción, por supuesto, es ponerse blanco y tardar en reaccionar. Y olvidarse de dónde ha dejado la chaqueta, las llaves y donde ha aparcado el coche.

Y allí van, de camino al hospital, donde los que trabajan allí ya están un poco moscas porque parece que son los únicos que trabajan esa noche mientras sus familias se ponen las botas. Pero son profesionales ante todo, y siguiendo las reglas a rajatabla: en festivos y fin de semana se da a luz al natural, la epidural sólo de lunes a viernes.

Después de unas horas de parto, aparece la criatura. Que llora, porque no ha llegado a tiempo parala cena con sus primos y ha llegado tarde porque Papá Noel ya ha repartido los regalos y hasta el año que viene no vuelve a pasar.

O como esta visualización, también tengo la de Nochevieja, pero aquí la madre va vestida de cotillón, porque de hecho, le pilla en uno.

O la de Año Nuevo, que todo el mundo está durmiendo habiendo acabado el año como Dios y tu lo empiezas dando a luz, com una pringada.

¿Y que me dices de dar a luz el día de los inocentes? ¿Quién se lo va a creer si tu propio marido se ha partido de risa en tu cara cuando le has dicho lo de “Cariño, creo que he roto aguas”?.

Por no hablar del trauma de las criaturas. Que tu cumpleaños no es importante porque justo ese día lo compartes con n tío gordo que le ha dado por llevarles regalos a todos los niños del planeta. Así no hay quien gane.

O de esas criaturas cuando se hacen mayores, que nadie va a sus celebraciones porque ya tienen planes, como cenar con la familia, comer con la familia, salir de fiesta con los amigos para celebrar que se acaba el año… Menos mal que a esto último estás invitado. Y te tienes que conformar con que después del brindis por un nuevo año que promete ser cojonudo, alguno se acuerde y diga: “Ah, por cierto,  felicidades tío! Qué cumplas muchos más!”

Pues eso, que hay días en que es mejor no haber nacido.

Aún así, aprovecho para hacer unas felicitaciones varias:

¡¡¡ Feliz Navidad a los que creen !!!

¡¡¡ Felices fiestas a los que no !!!

Ah, por cierto… ¡¡¡ Feliz Cumpleaños a Carlos y Blondie !!!