Como diría mi madre: Siempre dejándolo todo para el último día.
Y esta vez tien más razón que nunca. Yo pensaba disfrutar de la última noche y llevo 2 horas estresada porque no se acaba todo lo que me tengo que llevar mañana para empezar a vivir en el chiqui-ático.
Ayer creía que lo tenía controlado y han aparecido más cosas.
Y me mudo sin haber limpiado La Cueva, la mitad de cosas por el medio y la otra mitad como si no hubiera mudanza y chiqui-ático alguno.
Es como con los exámenes, te ha pillado el toro y te intentas convencer a ti mismo que si hubieras tenido sólo 2 días más te hubieras organizado y hubieras estudiado más.
Mentira.
Pero sí o sí, mañana empieza la mi vida en el chiqui-ático. Lo pendiente ya tendrá su momento.