Queridos Reyes Magos;
Voy a ir al grano: el año pasado me lo curré a más no poder, os escribí a mano, intentando que la letra fuera legible, con todos mis esfuerzos, porque para mi vosotros sois lo más.
Y os pido un pequeño empujoncito y vais y sois tan cabrones que me ponéis la zancadilla.
Os pido una hipoteca y como os parece que es demasiado, me dais algo más realista: comprarme la casa de mi abuelo. Pero claro, no contasteis lo especial que es mi padre, pasó lo que pasó y lo que era una hipoteca al final acabó convirtiéndose en un alquiler gratis en La Cueva. Sois unos cutres.
Así que este año, en el que me he portado megabien e incluso he ganado un premio por simpática, voy a empezar con una amenaza:
O me traéis EXACTAMENTE lo que pido o el año que viene me desapunto de vosotros y me hago fan del gordo de la barba blanca y sus renos voladores.
Al igual que el año pasado, sigo siendo poco recelosa, así que os pido sólo una cosa:
UN HOMBRE
Pero no me vale cualquiera, no.
Tiene que tener incluido estos accesorios, cualidades y extras:
- Debe ser RICO (parte de su riqueza vendrá de alguna herencia y la otra de haber invertido correctamente ese capital)
- Trabajará en un sitio donde se gane dinero razonable, no somos avariciosos, con un cargo de responsabilidad media-baja y que tenga que llevar traje. El traje, da igual el que lleve puesto, tiene que quedarle sexy pero a la vez diga “la corbata la ha elegido mi novia”.
- Cuando no trabaje, ira informal. Pero vamos, la mayoría de las camisetas las habrá elegido la mujer con la que vive. Osease, yo.
- Edad: entre 30 y 40 años.
- Con pelo en la cabeza y sabiendo que no se va a quedar calvo.
- No tiene que tener una mansión pero tendrá tendremos piscina cubierta con agua calentita.
- Y calefacción central.
- Y un pequeño jardincillo para mi nuevo hobby.
- Perros no. Ya llevo yo a Tigre y a Turbo.
- Estufa de leña si, y sólo si, tenemos un alguien que la encienda y controle que no se apague echándole tronquitos.
- Que compre flores cuando las del jarrón de la cocina estén para cambiar. Nada ostentoso, flores del día.
- Que me lleve de viaje findesemanalargo al menos una vez al mes y un viaje quetecagas una vez al año.
- Que me haga reír. Mucho.
- Y lo más importante: que quiera despertar conmigo todos los días de su vida.
Y eso es todo. Tan sólo acabo con 3 palabras: